viernes, 16 de abril de 2021

Sobre el gobierno y la autoridad

No hace falta un gobierno perfecto; se necesita uno que sea práctico

Aristóteles

Cada vez

que nos enfrentamos

a un nuevo gobierno,

convergen al mismo tiempo

una serie de criterios,

de opiniones,

de miedos, e incluso: acusaciones.

 

Todos estamos,

ecapacidad de decir,

dopinar 

lque debería ser

y lo que no debería ser

egobierno que llega,

egobernante que asume

epoder de dirigir

los destinos de los ciudadanos.

 

Incluso vamos más allá,

adelantamos nuestro criterio

dlas cosas malas

que podrían venir,

o de las cosas buenas

que podrían pasar,

sobre la base de percepciones

que vemos, en nuestra propia realidad.

 

Es curioso saber,

que a muchas personas

les interesa un gobierno

que robe, pero que haga obra.

Otros quieren un gobierno

que entregue bonos

a los que más lo necesitan.

Hay una parte de los que quieren,

que el gobierno los mantenga

esus puestos de servicio público.

Hay otros grupos

que piden condiciones adecuadas

para hacer negocios.

Unos, aunque no lo dicen en voz alta,

trabajan para que el gobierno

les permita, ganar mucha plata.

 

En fin,

egustos y colores

sobre lo que un gobierno es,

o debería ser,

hay muchos matices,

y responden siempre

acorazón de quien lo piensa.

 

Todo esto sucede,

muchas de las veces

emedio de gobiernos

autoritarios, corruptos,

ineficaces, mentirosos,

populistas, vinculados a mafias

y destructores de la paz social.

 

Somos muy exigentes,

amomento de pedir,

pero poco exigentes,

amomento de dar.

 

Si queremos un gobierno práctico,

que deje en paz a sus ciudadanos,

esos ciudadanos deben ser 

muy prácticos y corresponsables

dlo que hacen o no hacen

por su familia, su ciudad

y su país. 

 

Es en el gobierno,

ela autoridad y en el poder,

donde realmente se conoce

a los seres humanos.

Que esa suerte democrática

deje de ser una ruleta rusa

y que sepamos de verdad

cuáes el verdadero ser

dquien asume el poder.

 

Allí estaría la clave

duna democracia más práctica

más cercana y humana.

 

Cuando haya oportunidades de cambio,

npidamos peras al olmo,

sumemos y no restemos,

brindemos el beneficio de la duda,

pero sobre todo,

nnos durmamos en los laureles,

que el cambio, 

eparte de todos,

nsolamente,

duna autoridad o de un gobierno.

Porque si creemos que ellos,

son los únicos responsables del cambio,

solamente lograremos crear

monstruos y depredadores

dla democracia y sus instituciones.

No hay comentarios: