miércoles, 30 de abril de 2008

Y entonces...


Y entonces te vas,
dejándome solo,
por unos días lo se...
pero igual solo.

Quizá este tiempo
deje espacio
para que aquel añejo
corazón que me atormenta
lata menos por ti
y más por mis días.

Y entonces
como siempre,
vuelvo a mi ruina,
maldita reina
que todo domina...

martes, 29 de abril de 2008

No era Neruda... era

Queda prohibido

¿Qué es lo verdaderamente importante?,
busco en mi interior la respuesta,
y me es tan difícil de encontrar.

Falsas ideas invaden mi mente,
acostumbrada a enmascarar lo que no entiende,
aturdida en un mundo de irreales ilusiones,
donde la vanidad, el miedo, la riqueza,
la violencia, el odio, la indiferencia,
se convierten en adorados héroes,
¡no me extraña que exista tanta confusión,
tanta lejanía de todo, tanta desilusión!.

Me preguntas cómo se puede ser feliz,
cómo entre tanta mentira puede uno convivir,
cada cual es quien se tiene que responder,
aunque para mí, aquí, ahora y para siempre:

Queda prohibido llorar sin aprender,
levantarme un día sin saber qué hacer,
tener miedo a mis recuerdos,
sentirme sólo alguna vez.

Queda prohibido no sonreír a los problemas,
no luchar por lo que quiero,
abandonarlo todo por tener miedo,
no convertir en realidad mis sueños.

Queda prohibido no demostrarte mi amor,
hacer que pagues mis dudas y mi mal humor,
inventarme cosas que nunca ocurrieron,
recordarte sólo cuando no te tengo.

Queda prohibido dejar a mis amigos,
no intentar comprender lo que vivimos,
llamarles sólo cuando los necesito,
no ver que también nosotros somos distintos.

Queda prohibido no ser yo ante la gente,
fingir ante las personas que no me importan,
hacerme el gracioso con tal de que me recuerden,
olvidar a todos aquellos que me quieren.

Queda prohibido no hacer las cosas por mí mismo,
no creer en mi dios y hallar mi destino,
tener miedo a la vida y a sus castigos,
no vivir cada día como si fuera un último suspiro.

Queda prohibido echarte de menos sin alegrarme,
odiar los momentos que me hicieron quererte,
todo porque nuestros caminos han dejado de abrazarse,
olvidar nuestro pasado y pagarlo con nuestro presente.

Queda prohibido no intentar comprender a las personas,
pensar que sus vidas valen más que la mía,
no saber que cada uno tiene su camino y su dicha,
sentir que con su falta el mundo se termina.

Queda prohibido no crear mi historia,
dejar de dar las gracias a mi familia por mi vida,
no tener un momento para la gente que me necesita,
no comprender que lo que la vida nos da, también nos lo quita.


Alfredo Cuervo Barrero

fredi@euskalnet.net

Neruda...

viernes, 25 de abril de 2008

Mandatos mordaza


Cuenta la ciencia
que el Estado de Derecho
es aquel en el que se respeta
el debido proceso,
la oportunidad de impugnar
lo que se cree mal hecho.

Cuenta asimismo
que el absolutismo
es un sistema de gobierno
en el que todos los poderes
se encuentran reunidos,
sin limitación alguna
en una sola persona,
o institución estatal.

Cuando se nos preguntó
si queríamos ver la luz
si queríamos dar vuelta a la página,
cambiar el país viejo,
tener un nuevo país,
dejar la troncha y la trinca,
acabar con la mediocridad,
dijimos: ¡si!.

Cuando se planteó
la posibilidad constitucional
de formar una Asamblea tal
que con plenos poderes
e independencia estatal
marque el rumbo
de la nueva sociedad,
dijimos: ¡si!.

Cuando se nos preguntó
si cansados estábamos
de arbitrarias decisiones,
de la toma por asalto
de los poderes estatales,
dijimos: ¡si!.

Cuando nos plantearon
una nueva forma de ver
y las cosas hacer,
dijimos todos,
o la mayoría al menos,
que hacía allá
queríamos ir.

Mas con preocupación,
pena e indignación,
veo el camino recorrido
por quienes fueron elegidos
asambleístas del país,
y no de País.

El reloj marca imparable
el paso de las horas claves
y la historia registra
superficiales debates,
gritos amenazantes,
acusaciones criminales.
Reuniones, declaraciones,
fotos, videos y vidrios rotos.
Un puñado de artículos
retóricamente redactados
y algunos famosos mandatos.

El debate existe,
pero es entre unos pocos,
aquellos iluminados,
que redactan lo aprobado,
que de paso lo llaman mandato,
figura desconocida tal
en nuestro derecho constitucional.

La Constitución vigente,
de nada sirve,
de nada vale,
no es referente de nada,
pues fue la culpable
de nuestros pasados males;
incluso es palabra mala
y hay que borrarla.
Lo que ellos hacen
es la verdad intachable,
y “ya trabajan”
para que la gente la avale.

Y todos los mandatos
son absolutas verdades,
no pueden ser impugnados,
demandados o reclamados,
pues fueron redactados
con disposiciones mordaza,
fundamentadas en la nada,
que nos obliga a cumplir,
que nos impiden ejercer
derechos que están,
o estaban… no lo sé,
vigentes hace casi nada.

Transcribo su texto,
juzgue la ciudadanía el resto:
Este mandato es de obligatorio cumplimiento y en tal virtud, no será susceptible de queja, impugnación, acción de amparo, demanda, reclamo, criterio o pronunciamiento administrativo o judicial alguno y entrará en vigencia en forma inmediata, sin perjuicio de su publicación en la Gaceta Constituyente y-o en el Registro Oficial.

Termino diciendo
que es verdad
que en el pasado
se abusó del amparo constitucional
y las demandas de incosntitucionalidad,
mas no por ello
sin análisis previo
a la basura botemos
los derechos plenos
las garantías constitucionales
de todos los ciudadanos.
Me opongo y me opondré
a toda forma de explotación,
venga de donde venga,
sea del color que sea
y peor aún
si disfrazada viene
de democracia renaciente.

miércoles, 23 de abril de 2008

Libro, viejo amigo


Permaneces a la espera,
de entregar lo que tienes,
y no entiendo la manera,
pero siempre pareces alegre.

Aunque ahora que lo pienso,
puede ser que por momentos,
te vea triste,
o quizá cansado,
pues tu información
nadie ha necesitado.
Mas quien pierde no eres tú,
en tus páginas y párrafos,
en las letras y los gráficos,
se esconde el mensaje,
el conocimiento, la luz,
que ilumina el oscuro túnel
del día a día y nuestra cruz.

Como en todo,
los hay buenos,
los hay malos,
los hay mejores
o quizá peores,
pero los hay…
y aprovechar debemos
de sus enseñanzas eternas
que se contienen sujetas
esperando a que vayamos por ellas.

martes, 22 de abril de 2008

Feliz día GAIA


Felicidades en tu día,
tierra querida.
Que los abrazos,
felicitaciones
y buenas intensiones,
sean sinceras.
Que las promesas,
que proclaman,
embellecerte,
protegerte,
quererte
y respetarte,
se cumplan
por primera vez.
Que aprendamos
a convivir juntos,
pues un mismo cuerpo somos,
el hombre y la tierra,
la tierra y el hombre,
interdependientes siempre.

Feliz día GAIA

jueves, 17 de abril de 2008

Momentos de paz


Hace pocos días,
escuchando la radio,
oí una noticia buena,
una agradable invitación,
a montar en bicicleta,
conocer la naturaleza,
y disfrutar de sana diversión.

Conversé con mi hijo,
e hicimos planes juntos,
nos preparamos de a poco,
la idea era disfrutar en conjunto.

Llegó aquel domingo,
y con otros amigos
desde el Parque Central
con mucha gente partimos.

Y aunque no fue todo un suspiro,
pues el esfuerzo fue grande,
fuimos a la captación de Jipiro,
pasando por las quebradas de nuestro valle.

Y allí estábamos,
niños, jóvenes y adultos,
mujeres y hombres,
muchos sin conocerse,
todos para socorrerse.

La verdad…
fueron momentos de paz,
agitados como son,
profundos como llegan,
pues en el corazón dejan
el sabor dulce del buen pan.

Hasta entonces
poco había reparado,
en el transporte alternativo,
día a día nos quejamos,
del tránsito pesado,
de la acumulación de carros,
pero no analizamos
que como ciudadanos,
podemos proponer
una nueva visión vehicular.
Ese domingo,
entre palabras de inicio,
se pidió a nuestro Alcalde
y por supuesto al Municipio,
que consideren para todos
una ciclo vía permanente,
como un homenaje sincero
a toda nuestra gente,
que en lugar de contaminarse,
disfrute del buen aire…
del buen ambiente.

Nos costó subir,
no lo niego,
el esfuerzo por momentos
parecía corto,
dejabas de pedalear
y caminabas,
parecía que el corazón
de a poco se paralizaba,
y entonces levantabas los ojos
y frente a ti
la naturaleza profunda,
la paz del agua correr,
el olor del aire,
el color de los sueños
el color de la esperanza.

Entre aquellas emociones,
pensé en un momento
que nuestra vida,
a aquel paseo se parece,
un esfuerzo permanente
el que quiera subir a la cima,
un esfuerzo, a ratos desgarrador,
el que busque llegar lejos,
pero a la vez
un esfuerzo agradable,
llevadero,
si tienes cerca
una mano amiga,
que te acompaña,
que te anima,
a seguir adelante,
pues no podemos parar,
la vida no se detiene,
entonces debemos luchar.

Una vez que llegas,
todo es felicidad,
las caras alegres
se multiplican,
las manos amigas
se estrechan,
cada uno siente
que el esfuerzo
ha sido para bien.
Seguramente…
bajar es más fácil,
pero complejo a la vez,
se requiere prudencia
y estilo,
como en la vida de verdad.

Miré a mi hijo,
a mi hermano,
a los amigos,
que aquel domingo conocí,
miré las montañas,
el cielo eterno,
me miré por dentro a la vez.
Nada de lo banal,
era en ese momento necesario
o imprescindible a la vez,
los momentos de paz
son sencillos y profundos de ver,
y nos dirigen por donde
debería ir el ser.

Gracias Rodrigo
por la invitación,
aquel día entendí,
lo importante de tu vocación.
Activistas por la paz,
por el ambiente
y la buena salud en general,
montar en bicicleta
y coronar de apoco,
las montañas, el viento,
el corazón y por poco,
las vestiduras de Dios.

jueves, 10 de abril de 2008

Apagar la llama


La tradición cuenta
que desde hace años
la tierra entera
celebra unos juegos
que simbolizan paz
y unión entre los pueblos.

Los juegos nacieron para honrar,
para agradecer a los dioses,
para competir y luchar,
para la diversión de los hombres.

Luego… con el paso del tiempo
los juegos transformaron su fin,
eran momentos de reflexión,
y lo mejor era decidir
que era lo mejor para la población.

Entonces los juegos acogen
a todas las naciones,
a los mejores competidores,
que con espíritu olímpico
restaurado de la antigua Olimpia,
dan ejemplo a la Tierra entera,
de competencia leal,
de esfuerzo común,
de competir por un ideal
que no es el ganar
sino la superación personal.

Es conocido entonces
el interés que los juegos despiertan,
en todas las naciones,
pues son vitrina mundial
para el país sede
y todo su territorio nacional.

Han habido juegos
que la violencia afectó,
secuestros y muertes,
dopaje y engaño,
pero eso no ha afectado
a su espíritu llano,
a su convocatoria masiva,
a su respeto por lo humano.

Mas vemos ahora,
que los próximos juegos,
levantan polvo de la tierra,
pues su sede es fuente
de críticas y protestas,
por sus relaciones violentas,
con el Tibet
y las libertades plenas.
China es un coloso comercial,
pero coacciona la palabra,
la acción y la decisión,
impone, dispone de su gente,
y no rinde cuentas jamás.
Entonces ya que en vitrina se encuentra
la gente aprovecha para protestar
y no dentro de China,
sino a nivel mundial,
aprovechando el ligero paso
de la aquella llama olímpica
que recorre los pueblos
hasta llegar a su lugar.

La llama,
reflejo del espíritu olímpico
reflejo de lo puro,
de la igualdad,
del espíritu de fraternidad,
de la libertad en general,
del respeto y de la humanidad,
ha tenido que apagarse
para poder continuar,
ha tenido que apagarse
para dejar de iluminar,
como rechazo mundial
al irrespeto de los derechos
de toda una sociedad.

Y entonces si por ello
la llama se apaga,
también deberemos hacerlo
por las cosas que están mal,
por una mala justicia,
por una salud ausente,
por una educación mediocre,
por la desigualdad social,
por una autoridad indolente,
por una ley sin principios,
en fin… por la irresponsabilidad en general.

Si se pide un boicot a los juegos,
yo pido un boicot a la corrupción,
un voto de censura
una objeción de conciencia,
que de manifiesto ponga
que no somos encubridores o cómplices
de la irresponsable autoridad pública,
del especulador maldito,
del empresario indolente,
del trabajador engañoso,
¡No!, no podemos ni debemos
hacerle el juego a la vida vana,
el futuro con esfuerzo se construye
no con palabras bonitas,
o frases deslumbrantes,
o discursos vacíos,
o campañas infinitas.

Apagar la llama,
como simbólico acto
de que con nosotros no se juega,
de que de ellos,
no somos parte.

Encender la llama ¡si!,
para lo bello,
para lo que crecer el alma hace,
que la llama siempre
prendida sea,
y en el horizonte eterno
su luz ilumine a cualquiera.

jueves, 3 de abril de 2008

Sobre la inconsciencia. (Cartas a Santiago, mi hijo)


No recuerdo hijo mío
una crisis igual,
nuestra tierra querida,
inundada, aislada… maniatada.

Las carreteras se cierran,
las lluvias llevan agua por doquier,
las casas se hunden en la tierra,
queremos pronto volver al ayer.

El drama humano aumenta,
la gente sin casa,
la población sin agua,
los precios que suben,
la gasolina es escasa,
viajar es casi imposible,
y en medio de la oscuridad,
nadie que prenda una luz y guíe.

Y es que…
lo menos que esperas
como sociedad organizada
es que en tiempos de crisis
el servicio público,
las autoridades y servidores,
cumplan su función básica:
satisfacer necesidades colectivas,
de manera regular y continua,
del colectivo al que se deben.

Pero…
aquello es una quimera,
palabras escritas y no
acciones cumplidas,
nadie sabe qué nos pasa o aqueja,
como si aquellas,
autoridades e instituciones públicas
estarían rodeadas
de una pertinaz inconsciencia,
como si no tuviesen idea
del alcance de sus actos,
de las consecuencias de su inacción,
de su silencio y de su ineptitud.

Una inconsciencia de la autoridad pública
que se nutre del quemeimportismo,
que se fortalece de la inacción ciudadana,
que se proyecta gracias al populismo,
que se institucionaliza con el caciquismo.

Una inconsciencia de la autoridad pública
que nos deja un sabor en la boca
de inacción inaudita,
si la gente no se queja
“ha de ser porque está feliz”,
nada se previene,
todo se tiene que arreglar,
“el que llora no mama”
parecería ser la filosofía
del burócrata nacional y provincial.

Una inconsciencia de la autoridad pública
que adormita sus servicios,
que priva los sentidos
del servidor público en general.

Una inconsciencia de la autoridad pública
de la autoridad,
del representante institucional,
que espera sentado
hasta que los gritos y llantos
caen sobre cadáveres,
sobre restos de casas,
sobre escombros y carreteras destruidas,
sobre el hambre,
sobre el desabastecimiento,
sobre la especulación,
en fin… sobre la desgracia popular.
Entonces reaccionan,
micrófonos, cámaras,
declaraciones baratas,
vacías y nulas,
pues no se acompañan
de obras que son amores,
y no buenas razones.
Recurren de inmediato
a confundir al ciudadano,
mintiendo que no les corresponde,
que se encuentran desbordados,
que los comprendan,
que estén tranquilos,
que ya mismo llega la plata,
que no sean exagerados,
que el temporal no estaba planificado.

Una inconsciencia de la autoridad pública
que nos demuestra otra vez
lo equivocados que estamos
cuando al momento de votar
elegimos a nuestros representados.

Una inconsciencia de la autoridad pública
que permite se construyan
los sueños y las casas
en terrenos que para eso no sirven,
que dejan que se construyan obras
sin calidad ni seguridad.

Una inconsciencia
que a todos contagia,
que nos impide ver,
exigir, trabajar,
proyectarnos como ciudadanos.

Una inconsciencia,
¡maldita inconsciencia!
que nos tiene fregados,
ojala aprendamos
y se acaben los brazos cruzados,
estoy seguro que si juntos pensamos,
en el bien colectivo,
en la responsable
participación ciudadana,
acabaremos de a poco
con aquel fantasma que
desde años nos acompaña:
la inconsciencia de la autoridad pública
irresponsable y desalmada.