Después del día cuarenta y cuatro

Hay un único lugar

donde ayer y hoy se encuentran

y se reconocen y se abrazan.

ese lugar es mañana

Eduardo Galeano

El mañana

requiere ser pensado,

porque las cosas 

tal como las hacíamos

tal como las vivíamos,

no podrán ser igual,

al menos por un tiempo,

que nadie sabe.

El mañana,

nuestro mañana,

necesita de todos,

comprometidos,

solidarios y actuando

por el bien común.

El mañana,

gran parte de él,

espera de nosotros,

de nuestro compromiso

y reflexión.

El mañana,

o es solidario,

o no es mañana. 

Repensar la ciudad

Si cada uno barriera

delante de su puerta,

¡qué limpia estaría la ciudad!

Proverbio Ruso 

Las ciudades enfrentan

complejas decisiones,

en tiempos de peste 

y confinamiento.

Hay tantas opiniones,

como ciudadanos

existen en la ciudad.

Todos tienen su verdad,

su razón y justificación.

Hay que cerrar,

hay que abrir,

hay que sancionar,

hay que permitir.

Compleja situación,

cuando el hambre gobierna

cualquier decisión.

Las ciudades necesitan

repensarse, una y otra vez.

Necesitan entenderse,

saber quiénes las conforman.

conocer sus fortalezas

y sus debilidades.

Hoy las ciudades,

requieren y necesitan 

una nueva planificación,

unos nuevos hábitos.

Y generar corresponsabilidad

en todos sus ciudadanos.

Las ciudades necesitan

rehacer su forma de ser,

generar nuevas formas,

nuevos caminos,

para que todos sus ciudadanos

tengan la oportunidad

de sobrevivir y luego vivir.

Repensar la ciudad,

implica saber,

sobre aquellos que,

por diversas circunstancias,

no pueden avanzar por sus propios medios.

A ellos,

la ciudad y sus ciudadanos,

necesitan apoyarlos.

necesitan acompañarlos

y hacerles llevadero

el día a día

y la propia vida.

Si la ciudad no se repiensa,

si la ciudad no se transforma,

si la ciudad se piensa,

como la antigua normalidad,

no será ciudad,

sino prisión 

y campo de concentración.

Después del día cuarenta y tres

No sabrás todo lo que valgo

hasta que no pueda ser junto a ti

todo lo que soy

Gregorio Marañón

Sin recetas,

ni fórmulas mágicas,

la nueva realidad

no tiene respuestas.

Hay que construir los días

con las condiciones del día a día.

Dos ideas 

que podrían servir,

para esa construcción 

material y espiritual:

si el reto es una nueva normalidad

no podemos seguir haciendo las cosas

como las hacíamos antes,

debemos cambiar

esas formas de hacer.

Y, lo otro:

no olvidemos,

en ningún momento,

que no todos podrán lograrlo solos,

por diversas circunstancias

y por diversas condiciones.

Por tanto,

debemos llevarlos con nosotros

ayudarlos a ese nuevo hacer,

porque ellos serán,

lo que nosotros podremos hacer...

para que ellos sean.

Después del día cuarenta y dos

La vida es el arte

de sacar conclusiones suficientes

a partir de datos insuficientes

Samuel Butler

Si algo define

a un gobierno,

a un gobernante,

a un administrador,

a un responsable, 

es hablar y actuar,

sobre la base

de datos suficientes.

Las decisiones

que afectan a un colectivo,

a una organización,

a un grupo humano,

necesitan el respaldo

de datos suficientes.

Si los datos son contradictorios,

si una supuesta verdad

se sustenta en datos insuficientes,

nos enfrentamos al engaño,

a la mentira planificada,

a la manipulación solapada,

y a eso no lo podemos llamar

gobierno, gobernante, administrador,

responsable o, ser humano.

Después del día cuarenta y uno

El que quiera ser líder

debe ser puente

Proverbio galés 

Es importante

darnos cuenta,

que elegir líderes,

que seguir líderes,

que apoyar liderazgos,

es y será 

una de las responsabilidades

más grandes,

para nuestra supervivencia

y para nuestro bienestar.

Hoy, los lideres,

mundiales, regionales,

nacionales, gremiales,

locales, urbanos

y rurales,

son los que deben

aportar su sabiduría

y sus buenas artes

para conducir 

a las diversas sociedades,

hacia nuevas realidades,

más humanas y dignas.

Si los lideres no son puentes,

si los líderes roban,

si los líderes no rinden cuentas,

si los líderes hacen 

lo que les venga en gana,

el futuro se torna 

más complejo y sombrío.

Es vital,

trabajar, formar, promover

y apoyar aquellos liderazgos

que inspiran y promueven

con su ejemplo y acción:

las bases y pilares

de sociedades, justas,

pacíficas, humanas e inclusivas.  

Después del día cuarenta

Ama a todos, 

fíate de pocos, 

no hagas daño a nadie

William Shakespeare

Mientras más compleja

sea la vida y la realidad,

las normas de convivencia,

los principios de convivencia,

las pautas para convivir,

deben ser básicas,

sencillas y directas.

No hay tiempo

para llevar más carga

que la que ya tenemos.

Los odios y los resentimientos

están demás en estos días.

Eso no significa

que no aprendamos a distinguir

en quien si

y en quien no,

debemos confiar.

Que a todos nos vaya bien,

que todos tengamos 

las mismas posibilidades.

que ojalá todos,

podamos sentirnos 

y vivir como iguales.

Que no nos hagan daño,

por ser más ignorantes,

indefensos y confiados.

Que no hagamos daño a nadie,

a pretexto de vivir nuestra verdad.

La vida nos necesita humanos,

la nueva normalidad,

nos necesita dignos,

preparados y sensibles.

Las semillas no se plantan solas,

necesitan de una mano,

atada a un corazón que ame,

respete y aliente. 

Después del día treinta y nueve

Los ríos más profundos 

son siempre los más silenciosos

Curcio

El silencio

no es ausencia de pensamiento.

El silencio

no es ausencia de palabra.

El silencio 

es bocanada de aire

para el alma perturbada,

es oxígeno para el corazón

cuando siente desazón.

Estos días,

son, a veces,

momentos de silencio.

Y creo que,

al igual que conocernos,

aprender a manejar nuestro silencio

será parte del nuevo mañana.

Que nuestro silencio

se nutra de todos los colores,

de las emociones,

de las sensaciones,

de la desesperación

y de la emoción.

Que nuestro silencio,

transforme nuestra palabra.

Que nuestro silencio sea el maestro,

de lo que diremos mañana.

Después del día treinta y ocho

La sensación de la distancia

depende menos del espacio

que del tiempo

William Somerset Maugham

Tiempos de distancia

para poder estar juntos.

La distancia,

permite juntar los corazones,

los espíritus y las almas,

para que luego lleguen,

los abrazos y las lágrimas.

Que el tiempo nos sea leve,

para que la distancia y sus sensaciones

acorten el tiempo

y hagan llevadero el camino

La distancia es ahora,

el paso previo, del nuevo encuentro.

Después del día treinta y siete

Si quieres ir rápido, ve solo.

Si quieres llegar lejos,

ve acompañado

Proverbio africano

Juntos,

que no se nos olvide.

No es una carrera,

es vivir nuestra vida

y preparar la vida

para los que vienen,

para los que amamos

y los que nunca conoceremos. 

Frente a todo,

siempre juntos.

Vamos acompañados,

en esta vida,

en estos tiempos complejos,

siempre juntos.

La tierra del bien y del mal

La tierra contiene

en sí misma

el mal y su remedio

John Milton

Cruenta es la lucha

de aquellos que buscan

hacernos creer, que la suya,

es la verdad absoluta.

En la misma tierra,

en casi el mismo espacio,

encontramos mezcladas,

las medias mentiras

y las medias verdades,

junto, a las realidades ocultas.

Obligados a purgar una pena,

que sentimos ajena,

abrimos nuestros ojos

a la dura realidad

a la realidad de la desigualdad.

Lo sabíamos,

o lo sospechábamos,

pero no imaginábamos quizá,

cuánto mal había,

cuánta injusticia,

cuánta hambre,

cuánta miseria.

Parece ser

que solamente hay mal,

o que el bien,

no es tan fuerte en realidad.

La misma tierra,

nos brinda la oportunidad

de sentir el mal,

y en si misma,

encontrar el remedio,

la cura y la medicina.

En la tierra 

del bien y del mal,

ni en los peores momentos

descansa la maldad,

pero a la vez no existe referencia

de tal grado de solidaridad.

Tras la tormenta

antes de la llegada de la calma,

viene el tiempo de curar,

sanar, estudiar y entender

a la tierra.

Luego, 

la calma será una lectura

desde diversas ópticas,

realidades y momentos.

Será una siembra compleja,

sujeta a los climas naturales

y a los climas humanos.

Habrá que construir la calma,

en la tierra del bien y del mal.

Después del día treinta y seis

Hay una manera de contribuir 

a la protección de la humanidad,

y es no resignarse

Ernesto Sábato 

Adaptarse,

no es resignarse.

Adaptarse 

es entender el entorno,

entendernos,

y trazar nuevamente la ruta.

Nos adaptamos

para vivir,

para convivir,

para aprovechar

lo que el momento,

lo que tiempo nos brinda.

Nos adaptamos,

pero no nos resignamos.

En bien y salud de la humanidad,

no podemos resignarnos,

agachar la cabeza,

aceptar todo como un castigo,

una orden o una maldición.

Nos adaptamos,

para evolucionar,

para mejorar

y ser más humanos. 

Después del día treinta y cinco

La diversidad en la familia humana

debe ser la causa del amor y la armonía,

como lo es en la música, 

donde muchas notas diferentes

se combinan en la creación

de un acorde perfecto

Í Faith

Los tiempos complejos,

no pueden ser pretexto,

para olvidar a los más necesitados,

a los más vulnerables,

a los más débiles,

incluso, a los más manipulables.

El derecho al cuidado,

a la atención, a la protección,

a la asistencia humanitaria,

a la dignidad humana,

no puede estar sujeto 

al criterio peregrino,

del cualquier gobierno,

que, a pretexto del gobernar,

olvida en su accionar,

a los grupos vulnerables.

Sin armonía,

equilibrio, respeto y solidaridad.

no se podrá reconstruir 

lo que intentamos llamar 

una nueva sociedad.

Después de los días treinta y tres, y treinta y cuatro

Aprendí que no se puede dar marcha atrás,

que la vida es ir hacia adelante.

La vida, en realidad, es una calle de sentido único

Agatha Christie

Ir hacia adelante,

entendido como

un mejorarnos siempre,

un apoyarnos

constantemente.

Ir hacia adelante, 

por diversos caminos o rutas,

en diversos ritmos,

en diversos vehículos.

Si entendemos,

que ese ir hacia adelante,

nace en nuestro propio corazón,

en nuestras propias acciones, 

en nuestro propio ser,

esa calle llamada realidad,

tendrá un sentido único:

ser mejores humanos,

y construir una humanidad,

aún más humana.

Es proponernos hacer, 

lo contrario a lo que muchos líderes

están haciendo ahora,

en esta compleja actualidad:

competir, en lugar de colaborar.

Después del día treinta y dos

Sólo hay una pequeña parte del universo

de la que sabrás con certeza que puede ser mejorada,

y esa parte eres tú

Aldous Huxley

Somos,

una especie del escultor,

una suerte de alfarero,

que recibió por estos días

una porción de arcilla.

una mezcla de tierras,

de saberes, de historias,

de momentos y amaneceres.

Tenemos en nuestras manos,

la oportunidad perfecta,

para que en los días de la peste,

podamos mejorar

una parte de ese universo,

que por días nos parece gris,

otros oscuro y funesto.

Tenemos en nuestras manos,

la oportunidad perfecta,

para mejorar una pequeña parte

de este mundo tan complejo,

y es parte somos nosotros.

Frente a nuestras manos 

está la arcilla, la oportunidad de vida,

tallar, pulir, amoldar,

con la mayor sabiduría posible,

con una fuerza que jamás se detenga,

y con una belleza,

que sea la esencia,

de lo bueno, de lo sano,

de lo bien intencionado,

de lo digno... de lo humano.