viernes, 29 de enero de 2016

La educación libre

La sociedad no paga para que los profesores den clase,
sino para que los estudiantes aprendan
José Bernardo Toro A

Es un derecho humano,
está escrito en la constitución,
se llenan la boca los gobiernos,
de lo que han he hecho con ella
y de lo que van a hacer.

Hablan de ella en toda ocasión:
hablamos de la educación,
de aquel elemento clave
para formar mentes creativas y críticas,
seres humanos sensibles y sanos,
y también oportunidades de vida.

La educación es la medicina contra la miseria humana,
es la tabla de salvación
para aquellos que nadan en la ignorancia,
es la garantía de contar con personas
que en algún momento de la vida
contarán con un criterio propio
con una propuesta sensata
de cómo salir de la crisis,
y lo  que es más,
cómo no caer nuevamente en ella.
Esa educación libre,
ese arte de enseñar el librepensamiento,
esa responsabilidad de formar
instituciones nobles
que sueñen, diseñen, construyan e implementen…
que nos haga mejores
esa es la educación que vale,
esa es la educación que sirve.

Por el contrario,
si sometemos
a las universidades
o instituciones educativas
a la agenda del gobierno de turno,
entendida ésta agenda,
como el “agachar la cabeza”
y hacer lo que se les diga,
estaremos contribuyendo
a que exista un estado con todos los poderes
y una universidad en silencio,
cuando por el contrario
la universidad es voz,
es reflexión y análisis.
Es estudio, es creatividad,
es innovación y es docencia también,
es tantas cosas a la vez,
pero no puede ser sometimiento
no puede ser un agachar la cabeza,
un vivir la vida que te dicen que se viva,
el libertad, es buen hacer,
es integridad, es ética,
es buenas costumbres.

Es claro,
la educación es temida por la tiranía,
porque a mayor educación
mayor libertad,
mayor reflexión
menor corrupción,
menor engaño en la política,
menor  ejercicio de la politiquería.

Por una educación libre,

hoy, mañana y siempre.

No hay comentarios: