Nadie es inútil en el mundo mientras pueda aliviar un poco el peso de sus semejantes
Charles Dickens
El Cirineo representa
el símbolo de la ayuda.
Aquel que presta su hombro
para cargar la cruz del otro.
Aquel que se ofrece para ayudar,
cuando no se puede más.
Nuestro camino en esta vida,
está lleno de matices,
de distintas formas, colores,
tiempos y momentos.
No siempre podemos con todo,
no siempre podemos entender
aquello que nos pasa
y menos aún actuar cuando la carga,
es por demás pesada.
No siempre podemos,
pedir ayuda.
No siempre nuestros labios
pueden pronunciar las palabras,
aquellas que busquen la ayuda necesaria.
No siempre estamos dispuestos,
a aceptar la ayuda,
la presencia de aquel Cirineo
que pasa por nuestras vidas
y que sin otro interés que la ayuda
nos ofrece su presencia
para aliviar la pena,
la carga, el dolor, el sufrimiento,
la desesperación y la conmoción.
Encontrar un Cirineo,
es un momento especial.
Aprender de él o de ella,
de su desinteresada entrega,
de su felicidad por apoyar,
es uno de las mayores regalos
que la vida nos puede dar.
Debo confesar,
que en mi vida
he podido encontrar e identificar
a varios Cirineos y Cirineas
que han sumado su hombro
para ayudar a cargar
el peso que uno lleva
a lo largo de la existencia.
Su presencia,
corta o larga,
ha significado calma,
ha nutrido el amor propio,
ha dado respiro
cuando no tiene aire el alma.
Ayer,
uno de esos Cirineos,
-una Cirinea-
dejó la tierra
y ahora es alma.
Mientras traigo a mi mente
su amor y entrega,
confío en que sus hijos
encuentren,
más temprano que tarde,
muchos Cirineos en su camino,
en un momento de dolor inexplicable.
Debo ser Cirineo,
no por obligación,
sino por esta infinita necesidad
de cultivar la solidaridad
en tiempos de individualidad.
No hay comentarios:
Publicar un comentario