jueves, 8 de julio de 2010

Loja... puede

No anticipéis las tribulaciones ni temáis lo que seguramente no os puede suceder. Vivid siempre en un ambiente de optimismo.
Benjamín Franklin

Loja puede,
la ha demostrado la historia,
con diversas manifestaciones,
con hitos que nos han llenado de gloria.

Loja puede,
si se lo propone,
si se lo proponen sus hijos,
si nos los proponemos todos.

Loja puede,
continuar siendo grande,
demostrando a todos
que el último rincón del mundo
es también el rincón de la esperanza.

Loja puede,
enorgullecer a sus ciudadanos,
honrar a sus antepasados
y preparar el futuro
de sus nuevos vecinos.

Loja puede,
estoy seguro de ello,
tiene las condiciones innatas
para ser un paraíso de la vida,
una tierra modelo,
una sociedad viva.

Loja puede,
pero no debe quedarse
solo en lo que cuenta la historia,
en las glorias pasadas,
que son buenas,
pero que engañan el presente.

Loja puede,
pero debe trabajar intensamente
para que seamos eso que decimos ser:
capital musical y cultural,
y por qué no capital
de los nuevos emprendimientos,
de las nuevas ideas,
de las nuevas oportunidades,
de un modelo de vida
que no necesita convertirse
en lo que son las grandes capitales.

Loja puede,
y de ello son responsables
en una gran parte,
quienes son autoridades.
A ellos,
les corresponde allanar el camino,
hacer buenas leyes,
atraer capitales,
apoyar a los comerciantes,
pequeños o grandes,
a los vendedores,
a los nuevos profesionales,
a los que buscan oportunidades
para ser de esta tierra
la más linda de la tierra.

Loja puede,
pero nos falta creer en ello…
¡intensamente!
con todas nuestras fuerzas
con toda nuestra energía.
Nos falta entregarnos
a la causa de la tierra querida,
a la causa.. de la tierra prometida.

Loja puede,
pero necesita que sus Autoridades,
que sus líderes dejen de lado
sus personales intereses,
y definan un interés común:
el de todos los que en Loja habitamos,
a fin de que la unión de las manos
tenga un horizonte marcado
un camino por donde puedan ir nuestros pasos.

Loja puede,
y debe conectarse al país,
y al mundo también,
para conocer y saber,
que hay ejemplos que seguir,
que hay tantas cosas por aprender.

Loja puede,
y no está sola,
no solo están sus hijos en esta tierra
sino aquellos que se han ido
a buscar nuevas estrellas,
pero que no olvidan esta bella tierra,
y que dispuestos están
a apoyar a la provincia y a la ciudad.

Loja puede,
pero cuesta mucho
y quizá eso desaliente,
eso… y aquellos a los que les molesta todo:
el triunfo de unos, el éxito de otros,
como el perro del hortelano,
que no come, ni deja comer.

Dejemos las mezquindades de lado,
Loja puede, Loja se lo merece,
lo que sea o deje de ser,
será porque así quisimos que sea.

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