viernes, 20 de septiembre de 2024

S.20.

Dar y darse

la oportunidad de escuchar.


Nunca sabremos

lo que podremos aprender

o desaprender

si no escuchamos a las personas.


Escuchar hoy en día,

puede ser catalogado

como un derecho humano,

frente a la soledad

de una vida y un mundo ajeno y frío.

Puedes ser paz y puedes construir paz

La paz viene de dentro, no la busques fuera

Buda

Está presente

en los deseos

y en los anhelos

de personas,

leyes, oraciones,

religiones, filosofías,

formas y modos de vida,

en fin…

está presente

y a la vez ausente,

muy ausente.


Hablamos de paz,

deseamos paz,

anhelamos paz,

idealizamos la paz,

sufrimos sin paz

y llegamos a pensar

que es imposible la paz,

bajando los brazos

y dejando que avance la violencia 

en todas sus formas.


Podemos ser paz,

podemos construir paz,

es posible hacerlo

y debemos empezar

por creérnoslo.


La paz del mundo 

requiere escenarios,

recursos y tiempos

acordes al volumen

de esos requerimientos.


La paz de los países,

requerirá de esos esfuerzos

que cada sociedad necesite

en colaboración 

con sus autoridades

y sus comunidades.


La paz de los pueblos,

de las ciudades

de las poblaciones

necesita de su gente

y de sus dirigentes.


La paz de barrios

y comunidades

necesita de sus vecinos

y del accionar de su gente.


La paz de las familias

y de los grupos familiares

requiere del buen hacer

y del ejemplo de todos

en su conjunto.


La paz entonces

nos necesita

y cada uno tiene un rol,

en un marco de valores,

de condiciones

y de prácticas diarias.


Somos las personas,

las que estamos 

en el mundo, en los países,

en las ciudades, en las comunidades

y en las familias.


Somos en lo individual

el elemento clave para la paz.

Podemos ser paz

y podemos construir paz.

Empecemos siendo constantes

en el propósito, en nuestro propósito,

empecemos con ese orden necesario

de nuestro espacio: habitación y corazón.

Empecemos poco a poco,

sin detenernos,

dejando de lado

todo aquello que no construye paz

y aprendiendo

y poniendo en práctica

todo aquello que construye paz:

respeto, solidaridad, transparencia,

honestidad, orden, disciplina,

esfuerzo, resiliencia, perdón,

comprensión, entrega,

responsabilidad, integridad,

dignidad…

por esa vía, con esos valores,

y muchos otros (que no avanzo a enumerar)

con la práctica diaria,

primero para y hacia ti

y luego para los demás.


Por eso digo:

que puedes ser

y puedes construir paz.



jueves, 19 de septiembre de 2024

S.19.

Prudencia: 
sensatez, cautela
acompañada de sentido común,
que tiene en cuenta
circunstancias y posibles consecuencias
de lo que se diga, haga
o no haga alguien.

Prudencia:
juicio moderado
que evita riesgos innecesarios
y busca el bienestar propio
y el de los otros.

Prudencia:
valor clave
de las personas
y de las personas 
responsables de otras personas.

miércoles, 18 de septiembre de 2024

S.18.

Para ver en la obscuridad,
es necesario encender una luz.

Para ver
en la obscuridad 
de la confusión organizada
nuestra luz es la inconformidad
ante los que nos dicen,
que es normal lo anormal,
y que no se puede cambiar,
lo que necesita cambiarse.

martes, 17 de septiembre de 2024

S.17.

Tratarse a uno mismo,

como se trata a alguien

a quien uno ama

con locura

y que a la vez

tiene la responsabilidad

de siempre ayudar.

lunes, 16 de septiembre de 2024

S.16.

Tener un propósito,

no es cuestión moda,

o una frase bonita

que nos da estatus.


Imaginar,

describir,

escribir,

y trabajar para y por un propósito,

hará que haya un por qué

y un para qué en nuestra vida.


domingo, 15 de septiembre de 2024

S.15.

Hay tantos colores en el día.

Hay tantos sentimientos,

tantos contrastes,

tantas idas y venidas.


Intento quedarme,

con lo que me hizo feliz,

con lo que inspira vivir.

Con lo que de verdad,

vale la pena.

S.14. (-1)

Allí estaban,

aquellas palabras,

y allí quedaron,

sin ser pronunciadas.

¿Ya no representan algo?

No lo sé, no tengo palabras

para explicar lo que sé.


viernes, 13 de septiembre de 2024

S.13.

Viernes 

de buena o mala suerte.

Viernes 

donde vas y vuelves,

alegre o triste,

así sea en viernes.

Viernes,

con agua o con vino,

viernes contigo.

jueves, 12 de septiembre de 2024

Cambiar. Una necesidad vital

Que tenga la fuerza para cambiar

las cosas que puedo cambiar,

que tenga la paciencia para aceptar

las cosas que no puedo cambiar

y que tenga, sobre todo, 

la inteligencia para saber distinguirlas

Tomás Moro


Ten cuidado

con sentirte muy cómodo

en los distintos momentos de tu vida.


Cambiar,

debería ser,

o debe ser

una necesidad vital.


Si te piensas,

si te trabajas,

si lo conviertes

en un hábito,

cambiar no debe ser

-para nada-

un ejercicio complejo,

por no decir: imposible.


Eso mismo,

debería suceder,

en las organizaciones,

y en las instituciones.


Cambiar,

porque es necesario adaptar

y también adaptarse,

a nuevas condiciones

a nuevos momentos,

a nuevas expectativas.


Cambiar,

no garantiza mejorar,

pero para mejorar,

es necesario prepararse

y cambiar.


Cambiar,

y que ese mismo cambio

sea el ejercicio

para mejorar y corregir,

para adaptarnos,

y entender que esa adaptación

es el propio cambio.


S.12.

Dialogar será siempre,

la vía más directa

para aclarar las percepciones.

miércoles, 11 de septiembre de 2024

S.11.

Piensa en una idea,
dale vueltas,
corrígela…
hazla a realidad.

Si funciona, muy bien.
Si no funciona, vuelve a empezar. 

Si funciona, no te duermas en ella,
corrígela…
hazla a realidad.

martes, 10 de septiembre de 2024

lunes, 9 de septiembre de 2024

S.9.

Transformarse,

repensarse,

reciclarse...

Cambiar,

mudar,

reconstruir

lo que fue un antes,

lo que es el hoy,

lo que será el mañana.


Duele,

como no tienes idea.


Un dolor,

que debe valer la pena. 

sábado, 7 de septiembre de 2024

S.7.

Ojos con hambre,

que se quieren comer,

lo que tienen enfrente.


Miradas que hablan

de recordados besos

y de vidas pasadas.


viernes, 6 de septiembre de 2024

jueves, 5 de septiembre de 2024

La eterna solidaridad

                                                                                                                                                                                    

La solidaridad

es la ternura de los pueblos

Gioconda Belli

Mientras

un gran porcentaje 

de la clase política

vive sus públicas rencillas,

complica los procesos (y la vida),

desgobierna y malgasta

los recursos públicos,

un electorado maltratado

vive los efectos de la pobreza

el abandono, el olvido

y las afectaciones 

al medio ambiente.


La gente sufre

y apelamos a la solidaridad de todos.

La gente responde

y en acto solidario 

se unen manos y recursos.


Parecería que la solidaridad,

una de las artes perdidas,

se activa ante el desastre,

el acontecimiento catastrófico

que circula en canales

de comunicación.


Necesitamos cultivar

la solidaridad,

no para ciertos momentos,

si no como parte de la vida,

de este ejercicio de vivir.


Necesitamos descubrir

y hacer florecer,

condiciones fundamentales

para que la solidaridad sea

un día a día en nuestras vidas:

compasión, colaboración,

apoyo mutuo, 

responsabilidad compartida,

generosidad, empatía.

Seguramente, 

muchas virtudes más

nos hará ser siempre solidarios.

No son, solamente,

bonitas palabras o conceptos,

son, sobre todo,

formas de vivir,

de tener un propósito

de evitar ser como aquellos

que viven del cuento,

la mentira y el engaño.


Ser solidarios por convicción,

por dignidad y humanidad

y no por obligación,

por momentos o por interés.


¿De qué lado de la solidaridad estás?

S.5.

El arte de no perder
la capacidad de disfrutar
de la sencillez,
de la naturalidad,
del amor bueno,
    -y a su vez-
de la complejidad de lo sencillo.

miércoles, 4 de septiembre de 2024

S.4.1.

Llegar a ser,

lo que realmente uno quiere,

requiere saber:

qué es lo que en realidad se quiere.

S.4.

No morimos del todo…

algo de lo que fuimos:

palabras, gestos, hechos,

canciones, letras, poemas,

gritos, gemidos, miradas,

se quedan en el corazón.


martes, 3 de septiembre de 2024

S.3.

Levanté mi mirada 

y me encontré con la sonrisa

de quien entrega la vida,

y el tiempo de esa vida,

por una causa.


Que tu causa sume,

y que nos sea

una causa perdida

(porque hace daño,

porque complica la vida)

lunes, 2 de septiembre de 2024

S.2.

Mientras camino,

las voces de aquellos,

que dedican su tiempo

al arte de la envidia,

dispersan su veneno

a diestra y siniestra.


Mientras camino,

me enfoco:

en las voces que hacen

que mi alma sienta

que esto, vale la pena.

  

domingo, 1 de septiembre de 2024

S.1.

Fueron ráfagas,

de un viento frío,

las que congelaron mi cara.


Y la bruma

hacía que todo

fuese borroso,

como la vida misma.