Esta caricatura de Vladdo publicada en el universo.com hoy, resume el sabor amargo de la libertad de tres rehenes que las FARC liberaran en las próximas horas. Sabor amargo por cuanto el secuestro es un delito y un acto con la libertad de las personas y sus responsables no han podido ser juzgados. Sabor amargo porque ese secuestro ha dañado corazones y mentes de quienes permanecen secuestrados y de sus familias que viven con la incertidumbre de no saber si los secuestrados viven o mueren. Sabor amargo, porque esa liberación, desde mi personal punto de vista, ha sido utilizada por políticos que buscan aparecer como mecenas de la paz y que en concurridas y difundidas ruedas de prensa, dan detalles sobre las operaciones de libertad y buscan para sí el reconocimiento de la comunidad internacional. Sabor amargo… dulce para quienes regresan con su familia y para esas familias, amargo para quienes se quedan, para quienes han muerto, para aquellos que en el año nuevo nacerán en medio de un conflicto armado sustentado por la droga, la delincuencia y la política sucia.
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