jueves, 7 de marzo de 2024

Igualdad

Todos debemos saber que la diversidad es un bonito tapiz, y debemos entender que todos los hilos del tapiz tienen el mismo valor, sin importar su color

Maya Angelou

Hay indicadores 

que muestran 

los progresos de la humanidad.

Tantos y tantos campos,

de la ciencia dan cuenta de

progresos impensables,

para mejorar la salud,

la conquista del espacio

y el desarrollo de tecnologías

que construyen escenarios de vida

solamente vistos en ciencia ficción.


Y hay también,

indicadores que muestran,

que mientras ese progreso pasa,

niños y niñas mueren

por no tener qué comer

o por beber agua contaminada.

Indicadores que muestran

números impensables

de víctimas asesinadas 

en cruentas y sanguinarias guerras.


Los logros 

y progresos de la humanidad,

significan mucho

y nos brindan la esperanza

de un mundo mejor. 

Aunque esa esperanza,

se vea opacada por una sombra

que cubre graves inequidades:

pobreza, miseria y desesperación

de poblaciones y sociedades

presas de dictaduras,

disfrazadas de democracias,

y sometidas a regímenes

de terror y miedo.


Entonces… la igualdad no es tal,

la igualdad, se convierte

en un deseo, en un anhelo,

en una lucha, en una constante denuncia,

que pone sobre la mesa 

crueles datos sobre maltratos,

abusos, burlas, engaños,

violencias, crímenes y asesinatos

de seres humanos:

niños, niñas, adolescentes y mujeres,

víctimas de culturas violentas

que minimizan realidades inhumanas,

que ridiculizan y desconocen

que ninguna legislación

pondrá fin a la violencia,

si la violencia es parte ya,

de la vida.


Aprender a valorar,

respetar, entender, comprender,

apoyar, reconocer y fomentar

la dignidad en la diversidad,

es construir los cimientos

de una igualdad,

que es lo contrario a uniformidad.


No habrá igualdad,

si la mayoría,

o la otra mitad vive discriminación,

limitaciones, acosos,

abusos y violencia.

“Todos los hilos del tapiz tienen el mismo valor

sin importar su color”



No hay comentarios: