viernes, 29 de agosto de 2025

¿A dónde voy?

Tus creencias se convierten en tus pensamientos, tus pensamientos se convierten en tus palabras, tus palabras se convierten en tus acciones, tus acciones se convierten en tus hábitos, tus hábitos se convierten en tus valores, tus valores se convierten en tu destino

Gandhi

Escuchamos con frecuencia,

que el mundo se dirige a….

(múltiples destinos,

y ninguno agradable)

También solemos repetir

que como sociedad,

nos dirigimos a ….

o que estamos condenados a vivir en…..

(nuevamente muchos puntos suspensivos)


Por varias circunstancias y hechos,

leemos y anticipamos un destino

que nos involucra como sociedad,

como colectivo, como entorno social.


En ese análisis, en esa lectura,

visión o apreciación,

estamos involucrados 

cada uno de nosotros,

como individuos, como parte

de un todo más grande,

pero al final nosotros en particular.


No sé,

si hemos hecho el ejercicio,

de pensar a dónde nos lleva

nuestro propio camino,

nuestro propio sendero,

nuestra propia acción…

o inacción. 


¿Si alguien, 

que no seamos nostros,

caminara nuestro camino,

a dónde lo llevaría?


Cabe, cabe siempre,

en cualquier momento,

preguntarnos, hacia adentro,

a dónde vamos,

a dónde se dirigen nuestros pasos.

¿Nos llevan,

o nosotros decidimos?


¿En qué creemos,

y qué pensamientos producen 

nuestras creencias?

¿Hay coherencia

entre lo que pensamos y hacemos?

¿Cuándo determinan nuestras acciones,

esos pensamientos?


Ese ¿a dónde voy?,

es en verdad muy profundo,

pues nos transporta 

a una reflexión necesaria y vital,

para aclarar nuestras creencias,

pensamientos, palabras y acciones,

pues ellos serán el motor

que nos permita construir hábitos,

que se sostendrán en valores,

y que nos llevarán

por el camino de nuestro destino.


No sé si llegue,

a dónde quiero ir, 

lo que si sé,

es que quiero caminar

con el mayor grado de conciencia,

en una reflexión personal sincera,

provocada por ese: ¿a dónde voy?.


1 comentario:

Anónimo dijo...

La reflexión me invita a mirar hacia adentro, donde encuentro mi verdadero destino