“La tierra tiene suficientes recursos
para satisfacer las necesidades de los hombres,
pero no suficientes para satisfacer su codicia”
Gandhi
La tierra tiembla,
la tierra llora,
GAIA se acomoda
en respuesta
al trato que el hombre
le ha dado hasta ahora.
El dolor, la desesperación,
y la angustia,
se reflejan en las caras
de las víctimas humanas
que han quedado sin casa,
sin tierra… sin vida,
en el momento en que GAIA
decide moverse ligeramente
para cambiar de posición
para iniciar un ciclo de evolución
de acuerdo a su propia dinámica.
Pero nada parece preocupar,
a quienes las decisiones deben tomar,
a quienes representan naciones
que ha depredado todo
que han dejado al planeta desierto,
y totalmente cubierto
de hierro y cemento.
Poco o nada se preocupan
aquellos que representan a empresas
que degradan el ambiente,
que contaminan el aire,
el agua y la tierra,
que calientan el ambiente,
hasta el punto que GAIA
se reciente.
Lluvias extremas,
calores insoportables,
terremotos, temblores,
especies silvestres
prontas a extinguirse,
y todavía dudamos
del impacto del hombre
en el ambiente.
GAIA no es estática,
GAIA no espera sentada,
al final el abuso se paga,
al final la irresponsabilidad
del consumismo extremo,
de un modelo de vida
instalado en el primer mundo
que demanda energías,
que consume de todo,
que produce basura al extremo,
basura y residuos tóxicos.
Es verdad que no sabemos
que futuro dejaremos
a las próximas generaciones,
pero me preocupa también
que generaciones dejaremos
al mundo futuro.
Espero que no sean
generaciones irresponsables,
inconscientes, despreocupadas e indolentes,
ante un mundo enfermo,
enfermo por dentro y por fuera
que no repara al mínimo
sobre los impactos que genera.
Espero que la indolencia
de aquellos gobiernos
del llamado primer mundo,
cambie de una vez por todas
y asuman la responsabilidad
de frenar el calentamiento global
que rompan las cadenas impuestas
por las empresas e industrias
y los grandes capitales mundiales
que son los que imponen las reglas,
que son los que imponen sin trabas,
mientras GAIA no descansa
ajustando su estructura
a las nuevas condiciones.
¿Cuántas mas muertes
debemos esperar,
cuanta mas destrucción
deberá pasar?
para que las cosas cambien,
para que estemos en paz con GAIA
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