Apúrate, el tiempo acaba,
apúrate, necesitamos ganar
apúrate en declaraciones vanas,
la culpa al otro debes echar.
Apúrate, inaugura obras,
apúrate, tu fotografía debes poner,
junto a tu nombre cual prócer,
los electores lo tienen que saber.
No importa si nadas has hecho,
no importa si lo has hecho mal,
desempolva a tus enemigos viejos,
dí que eres un político de paz.
El tiempo de elecciones viene,
es momento de la campaña electoral,
apunten, disparen, ¡fuego!,
dar en el centro del electorado popular.
Prepara las promesas,
de aquellas que no se cumplirán.
Prepara los planes y programas,
esos que necesitan gente,
la gente de tu partido y del entrono familiar.
Acusa y “hecha el muerto”,
de todos tus males,
a todos aquellos que son tus rivales,
dí: “miren lo que me han hecho”,
“han perjudicado al pueblo,
necesito seguirlo sirviendo”.
Publica informes y afiches,
que hablen de lo bueno que has sido,
eso lo paga el presupuesto,
para eso es lo único que ha servido.
Haz pactos y alianzas,
no te preocupes si son de fiar,
lo importante es ganar y por mucho,
luego los rompes o los vuelves a tirar.
Besa a los niños,
abraza a las mujeres,
estrecha las manos a los pobres,
necesitas mostrarte sensible,
al dolor de la gente,
a todos sus horrores.
Estás casi listo,
no te olvides siempre mentir,
tranquilo, el pueblo olvida,
no estarían mejor sin ti.
No importa para lo que te eligieron,
no importa cuanto gastaron,
apúrate, el tiempo acaba,
es momento oportuno
para volverte a elegir.
Y… si por cosas del destino,
no ganas la elección popular,
en mesías y prestidigitador divido
te debes transformar,
habla de todo,
así nada sepas,
opina, comenta,
desacredita y critica,
a los que te ganaron,
a los que te quitaron
de tu boca un caramelo divino.
Apúrate, el tiempo acaba,
apúrate, necesitamos ganar
apúrate en declaraciones vanas,
la culpa al otro debes echar.
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